La European Commission aprueba la propuesta “de excepción ibérica” formulada por España y Portugal el pasado mes de mayo. El mecanismo, que se pondrá en marcha a partir del próximo 14 de junio de 2022 hasta el 31 de mayo de 2023, nace como iniciativa para contener la subida de precios en la electricidad y cubrir el próximo invierno.

El tope tendrá efecto directo tanto en los contratos indexados a pool como en los contratos a precio fijo negociados a partir del 26 de abril de 2022.

El mecanismo de ajuste hace uso de una fórmula matemática para limitar el precio del gas consumido por las centrales térmicas. El precio de referencia del gas utilizado por estas tecnologías será de 40€/MWh durante los seis primeros meses de aplicación de la norma. Después se incrementará en 5€/MWh mensuales, llegando a los 70€/MWh al final del periodo.

El precio de la electricidad, que resultará de la aplicación de la misma fórmula, dependerá principalmente del precio del gas en el mercado Mibgas y del precio del CO₂.

El coste del ajuste se reparte entre la demanda que se beneficia del mecanismo. Es decir, consumidores directos en mercado, comercializadores y agentes de mercado que adquieran energía a precio indexado al mercado mayorista.