Ursula Von Der Leyen anunció en el discurso sobre el estado de la Unión los detalles sobre las medidas que se aplicarán para aliviar la crisis de los precios de la electricidad, que puede recaudar 140 mil millones de euros.

La Comisión Europea propone establecer una tasa de los beneficios extraordinarios de las empresas de combustibles fósiles. El impuesto se aplicará a las ganancias obtenidas del año 2022 y que está 20% por encima del promedio durante los últimos tres años fiscales.

El ejecutivo también contempla la aplicación temporal €/MWh a los ingresos de las industrias subyacentes (renovable y nuclear). La diferencia en el precio con el mercado mayorista debería ayudar, entre otros, a las familias en un estado de vulnerabilidad y empresas electrointensivas.

En cuanto a la demanda eléctrica, los Estados miembros deberán reducirlo en un 10%, de los cuales al menos 5% tendrá que estar en horas pico.

Por último, por primera vez puede estipular los precios regulados por debajo del mercado y permitir que las PYME sean bienvenidas.

Se espera que los ministros de energía de la UE discutan las medidas presentadas por la presidenta a fin de mes y decidan cómo pueden transponerse en cada país.